Dónde encuentro agua bendita

¿Dónde encuentro agua bendita?


Felipe Pérez Martí

4 de Diciembre de 2022.

Hola, todos.

He recomendado tomar, como remedio contra los efectos secundarios malignos de las vacunas contra el Covid 19, una cucharada diaria de agua bendita:

https://www.quehacer.wiki/wiki/El_agua_bendita_contra_los_efectos_secundarios_de_la_vacuna_Covid


Es sorprendente, pero muchos católicos no saben dónde se puede encontrar agua bendita. Muchos no católicos se han interesado en esto, claro. Los católicos no muy enterados creen que se encuentra en las iglesias, por ejemplo en las pilas bautismales, o en los pequeños receptáculos que a veces (cada vez menos) hay en la entrada y la gente los usa para impregnar su mano y persignarse (hacerse la señal de la cruz). Pero no saben si se puede tomar de ahí. Algunos se imaginan que si uno toma agua bendita de esos lugares, sin pedir permiso, es como un robo. Que no es cierto, claro. Solo que es bueno avisar al sacerdote en caso de que se haga por si es necesario que permanezca lleno para atender a otras personas.

Pero como el diablo anda suelto en estos tiempos apocalípticos, no es bueno confiar en agua bendita que uno no conozca desde su origen: abajo les paso el enlace, en inglés, de una noticia que informa de intoxicación de ortodoxos rusos por beber agua bendita. Por lo tanto, como el maligno puede haber manipulado agua bendita que uno no conozca, la respuesta a la pregunta de este artículo, para todos, es muy sencilla, y es la que di a un amigo en Qué Hacer (Venezuela-zuela) Occidente: lo mejor es llevar su propia agua, para que un sacerdote la bendiga. Es bueno hacer notar que incluso si un sacerdote está en pecado, o incluso llegar al extremo de estar poseído por un demonio, sus poderes benignos no se modifican: la hostia consagrada es Jesús; la confesión es válida, y el agua bendita es de confianza. EEs la doctrina oficial de la iglesia y es completamente confiable, tanto por la teología como por el testimonio de muchos santos. Santa Teresa, por ejemplo, una vez vio a un sacerdote que estaba oficiando la misa y se dio cuenta de que estaba en grave pecado mortal, y que iría al infierno si no se enmendaba. Sin embargo Jesús le hizo saber que estaba realmente en la hostia consagrada por ese sacerdote, lo que le indicó lo grande que es el amor de Dios por nosotros.

Alguien podría preguntar si eso cuesta dinero. La respuesta es que no: es gratis. Le decía yo al amigo, citando el evangelio de ayer (reproducido abajo), que un sacerdote no puede cobrar por eso, ya que Jesús les ordenó no hacer eso. Y esta frase de ese evangelio lo refleja en su espíritu:

“Sanen enfermos, resuciten muertos, limpien leprosos y echen los demonios. Ustedes lo recibieron sin pagar, denlo sin cobrar”.

Así que el costo de esa agua tiene que ver con lo que uno paga por obtenerla (que es elevado en Venezuela, como sabemos, en algunos lugares), y el costo del traslado hasta la iglesia y desde ella hasta la casa. Si el costo de traslado es mucho, y no se va muy frecuentemente a ella, les recomiendo llevar unos cuantos litros para pedir su bendición. Así también pueden compartirla (¡sin cobrar! ;-) ) con otros familiares, amigos y conocidos. Es una tremenda bendición.

Es lógico que uno ore con fervor cuando se tome la cucharada, claro. Persignarse con devoción sería suficiente, un buen inicio. Para quienes lo han olvidado, cuando uno se persigna dice, mientras se hace la señal de la cruz, primero tocando la frente, luego el pecho, luego un hombro, y luego el otro: En el nombre d el Padre, del Hijo, y de Espíritu Santo, Amén. Y es que todo cuanto los cristianos hacemos, por mandato de Jesús, lo hacemos en Su nombre. Por tanto, el agua bendita, ese remedio bendito contra el maleficio contenido en las vacunas (o en el virus mismo, por cierto, si nos ha dado, pues residuos de él permanecen en nosotros, como cualquier otro virus), lo tomamos en Su nombre, invocando Su poder sanador, para que actúe a través del bendito líquido.

Quienes vayan frecuentemente a la misa no tienen el problema de tener que llevar mucha agua, claro. El sacerdote no se negaría a bendecir el agua que les lleven. ES muy sencillo para él administrar una bendición. De hecho, recomiendo que vayan por lo menos una vez a la semana, y que comulguen, si están en gracia (si han pecado deben confesarse antes de comulgar, por supuesto!). Aquí hablo un poco al respecto:

https://www.quehacer.wiki/wiki/Permanecer_fiel_en_estos_tiempos_apocal%C3%ADpticos

Y resumo lo recomendado ahí con esta cita:

“Nuestra Madre Santísima ha recomendado una y otra vez cinco cosas para estar preparados para lo que viene: 1. Oración. 2. Ayuno. 3. Lectura bíblica. 4. Confesión por lo menos una vez al mes. 5. Eucaristía en la misa por lo menos una vez a la semana.”

Finalmente, aprovecho para recomendarles que antes de hacer cualquier cosa, recuerden que debemos hacerla en nombre de Dios, y persignarse, con devoción, es la mejor manera de lograr ese cometido. Así, por lo demás, lo que se va a hacer, queda bendito por Dios. De hecho, el hecho mismo de persignarse es un “sacramental”, de los que hablo en el artículo sobre el agua bendita. Así que nosotros mismos podemos bendecir nuestras acciones con un sacramental, en el instante mismo de la persignación. Es lo mejor, pues esa bendición tiene mucha fuerza, como expliqué en el artículo, en particular contra las fuerzas malignas. ¿No les parece útil?

Cordialmente y pendientes, que ahora es cuando viene lo bueno (¡para los buenos!),

Felipe

Anexo 1: Evangelio del día sábado 3 de Diciembre de 2022


  • Mateo 9,35-10,1.6-8:*

“En aquel tiempo, Jesús recorría todas las ciudades y pueblos; enseñaba en sus sinagogas, proclamaba la Buena Nueva del Reino y curaba todas las dolencias y enfermedades. Al contemplar aquel gran gentío, Jesús sintió compasión, porque estaban decaídos y desanimados, como ovejas sin pastor. Y dijo a sus discípulos: «La cosecha es abundante, pero los trabajadores son pocos. Rueguen, pues, al dueño de la cosecha que envíe trabajadores a recoger su cosecha.» Jesús llamó a sus doce discípulos y les dio poder sobre los malos espíritus para expulsarlos y para curar toda clase de enfermedades y dolencias. Diríjanse más bien a las ovejas perdidas del pueblo de Israel. A lo largo del camino proclamen: ¡El Reino de los Cielos está ahora cerca! Sanen enfermos, resuciten muertos, limpien leprosos y echen los demonios. Ustedes lo recibieron sin pagar, denlo sin cobrar”.


Anexo 2:

Enlace en que se narra la intoxicación por agua bendita:

https://www.nbcnews.com/id/wbna35054709