El hambre en nuestro pais, los indigenas de Seattle y la profecia de liberación de Venezuela

El hambre en nuestro país, los indígenas de Seattle y la profecía de liberación de Venezuela

Felipe Pérez Martí

Movimiento Libertadores

10 de Julio de 2021.

https://youtu.be/KRCGSJrSDp4

Ayer y hoy hemos tenido días de intenso intercambio en el liderazgo del ML y el Pacto Republicano para interpretar de manera correcta lo que estaba pasando en Caracas. Lo del Coqui, el FAES, etc.

Había dos tesis opuestas. Una de Dalila Solórzano, que decía que esto podía significar el inicio de una guerra civil que puede deponer a Maduro.

La otra fue de Víctor Rodríguez, líder de nuestros grupos de resistencia civil (los “Templarios” que están con nosotros en una nueva cruzada para recuperar la Tierra Santa Venezolana). Su tesis fue que esto iba a fortalecer a Maduro y que el pueblo iba a ser el perjudicado. Con esto no se saca a este régimen.

La interpretación correcta fue la de Víctor, por lo menos para el momento. Pero lo de Dalila tiene sentido para lo que viene luego, nuestro plan C: insurrección popular con apoyo militar patriota, según hemos dicho en nuestros últimos comunicados, en particular el último en que invitamos a la firma de un Acta de Liberación para los presos políticos (o sea, todos los venezolanos):

https://www.quehacer.wiki/wiki/Abajo_Cadenas_para_todos_los_presos

https://www.movimientolibertadores.com/doc/AudioVideoPresosPoliticosMyC.pdf

Pronto les pasaremos un comunicado (se refiere a este, que ya publicamos: https://www.quehacer.wiki/wiki/La_cota_905_y_la_pol%C3%ADtica_criminal_de_seguridad_ciudadana). sobre la violencia desatada en Caracas y zonas centrales del país, pues hay muchas noticias engañosas sobre eso, muchas fake news. Y nuestros Templarios tienen mucha información, pues están en el terreno constantemente. De hecho tenían una actividad, junto con nuestros líderes de trabajadores el 7, el mismo día de nuestro comunicado “Abajo Cadenas” y no pudieron por la fuerte presencia policial represiva por la altísima tensión que se avecinaba. Se trata en realidad de luchas entre bandas por control de territorio, las del desgobierno y las del Coqui luego de un rompimiento temporal del arreglo de convivencia e interés mutuo que tienen. Ninguna de esas banas delincuenciales favorece al pueblo preso, como explicaremos con detalle, según el borrador que nos está haciendo Víctor al respecto.

Mientras tanto quiero pasarles mis comentarios a la Pastora evangélica Norelys Brito, quien está con nosotros en el Congreso del Pacto Republicano. Realmente una santa, que tiene una altísima sensibilidad por los pobres y los desvalidos y los atiende día y noche en su comunidad. Pero no solo en lo espiritual. Ha logrado un milagro con ellos, pues recibe donaciones constantemente parra alimentar a un gentío diariamente por allá, especialmente los niños de la comunidad. Su labor es notable y respetada.

Conversando con ella de lo espiritual y lo político, le mostré las fotos que saqué en mi caminata por un parque de Seattle, un sitio de tumbas de muchos indígenas. Aparecen tres esculturas indígenas y una canoa auténtica de muchos años atrás. Una de las esculturas es de un jefe indio presidiendo la tumba principal. Ahí las tribus Suquamish, Muckesoot, Tulalip y Noqualmie rinden honores, en un epitafio, a sus ancestros enterrados en esa zona. Como verán, la zona es muy hermosa y está en un risco que da al lago. Ellos pescaban ahí antes de la venida de los colonos norteamericanos, que ocuparon sus tierras y los enviaron, contra su voluntad, a unas reservaciones en las que muchos se suicidaron y se sentían como presos, recurriendo al alcohol y a las drogas para buscar consuelo.

Le decía a la pastora Norelys que yo estimaba mucho a los indígenas. Ella me decía que las fotos eran muy bonitas, pero que ella estaba ocupada de sus niños y su gente con hambre y no podía salir de esa misión encomendada por Dios. Estaba como “atada” a eso, aunque no quisiera. Claro que sí que lo quería, pero era como decir que no se puede ocupar de lo político, de los indígenas, etc. Le respondí en el audio que yo también estaba “preso”, o “cautivo”. Más bien “cautivado” por todo esto de lo político, de cómo resolver lo del hambre y la liberación e todos los presos, pasados, presentes y futuros.

También me comentó que ella favorecía la versión de Dalila, pues coincide con las profecías de una señora que las ha pegado todas, quien en los años sesenta predijo que en esta época habría una suerte de “guerra civil” en Venezuela, en la que participaría un país asiático (¿China?), Estados Unidos y Colombia. Quedó en pasarme la profecía. Me había dicho con anterioridad que, como seguidora de Jesús, no le gustaba la violencia en la política.

En el audio le doy mi apreciación que todo está relacionado. Los indígenas están como presos, así como los venezolanos. Ambos han pasado trabajo y hambre, con depresión y suicidios, pues les quitaron sus tierras, como les ha pasado a los venezolanos en la práctica, al punto que muchos han emigrado, y los que están en el territorio se sienten presos en su propia tierra, lo cual ha generado mucho sufrimiento, entre ellos la depresión y los suicidios. Le dije que la lucha es espiritual y que estamos en tiempos apocalípticos, pues los humanos han cometido pecados contra las leyes naturales y sociales. Que Dios es el creador, no solo de lo natural y sus leyes, sino de los social y sus leyes también. Que el Plan C de insurrección popular con apoyo militar no significa violencia, sino fuerza para impedir la violencia, el genocidio. Que es para liberar a los presos, terminar con el hambre. Y que la lucha es universal y ancestral. Todas las cosas se conectan en este momento, y Venezuela va a jugar un papel central en la liberación planetaria.

Este es al artículo en que muestro que la salida de fuerza no necesariamente significa una salida violenta:

https://www.lapatilla.com/site/2018/06/12/felipe-perez-marti-la-consulta-tipo-16j-para-elegir-presidente-oportunidad-y-riesgos/

Luego les paso las fotos y anexo arriba pueden oír el audio en YouTube, a ver qué les parece.


Cordialmente y pendientes,

Felipe