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Junta de Transición para salida por la fuerza. Algunos candidatos con Moral, Luces y Amor

Felipe Pérez Martí

Movimiento Libertadores

13 de Enero de 2023.

Estimados todos. Como saben, hicimos un documento de fin de año y comienzo del nuevo,

https://www.quehacer.wiki/wiki/El_sustituto_de_Maduro:_%C2%BFRosales_o_Mar%C3%ADa_Corina%3F_Los_re-acomodos_y_la_Junta_de_Transici%C3%B3n_ad_hoc

en que continuamos con la tesis de que el Estado Profundo ha decidido poner de lado a Maduro. Y que el sustituto puede ser, tanto Manuel Rosales, como María Corina Machado (MCM).

1. Motivación introductoria

A algunos esto les parece sorprendente. Pero hemos profundizado en el análisis, sobre todo el internacional y nos ha quedado claro que los ladrones mayores quieren acomodar a los rateros menores para que todo el mundo salga ganando (menos el pueblo venezolano, claro), dada la crasa ineficiencia de Maduro y su régimen, que hay que mejorar con otro títere más conveniente para todos ellos. A Maduro, Cilia y familia les darían un “puente de plata”, para que viva en otro lado con la respectiva plata robada a los venezolanos.

Quienes creen que esto es asombroso también deberían sorprenderse por el hecho de que el gobierno de Joe Biden, luego de toda la crítica que se hizo al G3 por deponer a Juan Guaidó y la figura del interinato, otorgó las licencias a esa misma Asamblea Nacional para manejar los activos externos venezolanos [1]. Así como llegó a acuerdos con Maduro en el tema petrolero y con Cuba en muchos aspectos económicos y diplomáticos. Lo que explica lo que ha pasado confirma nuestra tesis: Es claro que el entre el G3, Maduro, Cuba y EEUU han estado llegando a acuerdos; y es también claro, como siempre lo identificó la parte crucial de nuestra tesis, que quien manda en todo esto es quien tiene más poder económico, la parte internacional de estos acuerdos, sin importar la justicia, los derechos humanos, la democracia. Se confirma así nuestra teoría sobre cómo funciona el sistema caza-renta, esta vez a nivel internacional. En nuestro comunicado anterior describimos que, significativamente, el “chavismo originario”, con Rafael Ramírez y Diosdado Cabello, también están en la jugada y es lógico que así suceda, de acuerdo a los intereses que manejan, pues salen mejor posicionados que como están con Maduro, sobre todo de cara al futuro.

Pero es que además decíamos que MCM parecía igualmente absorbida por el caza-rentismo, tanto azul (el relacionado con oposición venezolana), como el negro (el del Estado Profundo, en particular su títere en Estados Unidos, Joe Biden). Y por tanto estaba jugando el mismo juego, en que no todo es idílico y hay un período de pugnas por poder entre los caza-renta y entre sus títeres. Leopoldo igualmente está en la jugada y su arremetida de ahora contra el G3 hay que interpretarla como un posicionamiento electoral de cara para las primarias, que quiere impulsar. Como buen animal político deduce que si no hay primarias el candidato sería Rosales; y que si las hay el candidato podría ser él, o por lo menos seguiría vivo en el escenario político. De la misma manera piensa MCM, como algunos otros aspirantes, por pura lógica política. Y es un asunto que debe ser dirimido. Nosotros nos inclinamos por creer que sí va a haber primarias, pues lo más lógico es que el Estado Profundo va a presionar en esa dirección por preferir el beneficio de impulsar su falsa cara democrática, aunque la otra alternativa también es posible en el contexto venezolano, con Cuba jugando un papel que no quiere arriesgar y tiene cierto poder de negociación con el Estado Profundo.

Así que no es solo un acuerdo entre EEUU, el G3, Maduro y Cuba. La cosa incluye al G1 (Leopoldo), el chavismo originario y MCM. Todos con sus aspiraciones de poder y, por eso, con pugnas a dirimir, en particular en las primarias y sabiendo que el premio a conseguir es bastante alto, ya que el supuesto en el acuerdo, según nuestra hipótesis, es que en las presidenciales ganaría el candidato opositor. Así todo se ve cuadrando, como el lector mismo podría deducir. Lo que para la mayoría de los venezolanos tiene grandes complejidades, quedan aclaradas con esta tesis que arma el rompecabezas. Esta comprensión es crucial para nosotros también en el lado opuesto de este conflicto, el de los ciudadanos venezolanos en el contexto mundial y nos permite hacer propuestas tácticas dentro de la misma estrategia del coraje que se reafirma como la correcta por todo esto. Se podrán ver al final, en la sección de conclusiones y propuestas.

Miguel Arcángel López Royett, un representante local de Vente bien intencionado, comentó lo siguiente cuando vio el documento de fin de año:

“Felipe hermano, vamos a apoyar a María Corina en esta gran cruzada, ella es una mujer sincera y honesta, démosle la oportunidad”.

Otra persona, independiente, Rubén Llovera, dijo:

“Aquí me anoto. María Corina es referencia de honestidad y rectitud. La acusan de ser radical, no hay más acusación.”

Miguel López respondió:

“Totalmente hermano, la mujer ha demostrado ser honesta y cuando un político tiene esa cualidad no podemos perder esa oportunidad porque son pocos, creo que uno entre un millón, que sea honesto.

“Todos unidos con María Corina, tienen que sentarse todos los que queremos libertad y afirmar estrategias darle el apoyo y ponerla a firmar un documento de compromiso, más que sea ella la líder, la figura.

“Están los mecanismos para no fallar en este última oportunidad.”

Maritza Moreno, independiente de Guárico, terció:

“Bueno claro que sí es muy honesta y además es mujer y nunca hemos tenido una mujer como presidente, y ella va a ser única y sí nos gobernará como lo merecemos todos los Venezolanos. Amén, amén y amén. Dios nos concientice a todos.”

Para responder a estos compañeros y al país sobre estas dudas, escribo la presente aclaratoria en que afirmo, con el Movimiento Libertadores que, incluso si MCM no fuera corrupta, estaría siendo manejada por un sistema corrupto, que terminaría absorbiéndola y utilizándola, a ver qué les parece. Mi análisis se basa en varias cosas: los principios gerenciales que aplicamos a la política; los de Teoría de Juegos; el diagnóstico sobre el mapa de conflicto nacional, ahora internacional, basados en Economía Política y, por último, la experiencia que ha tenido el país sobre estos asuntos, sobre todo el golpe de estado de nueva generación contra CAP II, el más grande crimen político-económico que hemos experimentado en nuestra historia, que nos hizo perder una gran oportunidad y nos ha tenido contra las cuerdas desde entonces. Le agrego parte de mi experiencia personal, pues he sido testigo de excepción y es muy sintomática de cómo actúa el lado malo de este conflicto, como verán.

2. El diagnóstico correcto

Sobre el diagnóstico y el mapa de conflicto que se deriva de ello ya hemos hablado bastante, en particular en los documentos en que emplazamos a MCM luego de que decidió optar por la estrategia electoral (Ver las referencias en [2]). Se basa en el análisis de nuestra enfermedad, conocida en la literatura especializada como La Maldición de la Abundancia, que se deriva de nuestra propiedad sobre el Petróleo. Sin detallar los síntomas económicos (sobrevaluación estructural, subdesarrollo productivo en agricultura e industria, y pro-ciclicidad del gasto fiscal, endeudamiento externo endémico), haremos un resumen del síntoma principal de Economía Política de la enfermedad: la conformación de un cartel de mafias que se organiza para usufructuar la renta petrolera desde el estado. De manera que la democracia (gobierno que representa a los ciudadanos) pasa a ser una cleptocracia (gobierno que representa a los delincuentes y sus agentes, a quienes hemos llamado, naturalmente, caza-rentas).

En cualquier país democrático existen los caza-renta, que son empresarios que usan a empleados para hacer cabildeo con personeros públicos de poder con fin de obtener prebendas de la relación que de ahí se deriva y pagar al funcionario involucrado su respectiva comisión. El problema de la maldición de la abundancia surge porque, en esos países, dichos caza-renta se organizan entre sí y llegan al colmo de capturar a todo el estado para usufructuar sistemáticamente la renta del commodity respectivo, en nuestro caso petróleo (en otros casos puede ser oro, diamantes, cobre u otros recursos naturales). Los cabilderos que usaban para contactar funcionarios públicos se transforman en los funcionarios públicos mismos, y son colocados en las posiciones clave de los poderes ejecutivo, legislativo y judicial. Tales funcionarios del estado se convierten en títeres del cartel de mafias caza-renta. Y no tienen porqué ser impuestos como dictadores, sino que pueden ser electos, pues los caza-renta controlan los mecanismos de elección, en una combinación, dependiendo del sitio y del tiempo, entre el poder mediático que promociona sus candidatos y los mecanismos de procesamiento de votantes y conteo de votos. Esos funcionarios, en vez de representar los intereses de los ciudadanos, representan ahora los intereses del cartel.

Este diagnóstico es tan importante que es el que nos permite visualizar el mapa de conflicto verdadero, oculto a la gran mayoría de los analistas, muchos de ellos parte del sistema caza-renta. Que incluye a gran cantidad de brazos en la sociedad civil. No solo a nivel de partidos y líderes políticos, sino en medios de comunicación, encuestadoras, analistas político-económicos, sindicatos y organizaciones empresariales, instituciones académicas y sistema cultural que llega a nivel ciudadano. Por ejemplo a través del clientelismo político-electoral y el populismo rentista.

Según la falsa narrativa que ese tinglado caza-renta usa para esconderse y engañar a los ciudadanos, el conflicto en Venezuela es entre el desgobierno y la oposición. O entre una dictadura y los electores. O entre la derecha y la izquierda. O entre liberalismo y marxismo. O entre el chavismo y el no-chavismo. Con las combinaciones de esas categorías. Recalquemos que lo importante de esa narrativa es ocultar la verdadera naturaleza del conflicto, para así seguir en el poder frente a las víctimas de todo esto, los ciudadanos venezolanos.

Todas esas contraposiciones, que en otros países pueden ser valederas, son fundamentalmente erróneas en un país como el nuestro, según lo muestra no solo la teoría, sino la práctica histórica. El verdadero conflicto es entre el cartel de mafias caza-renta, con sus títeres, personales e institucionales, y el resto de los venezolanos. Sin embargo, el sistema termina teniendo éxito en imponer esas mentiras, lo cual es clave para los que mueven los hilos. Quienes se dan cuenta de la verdadera realidad y la denuncian, son atacados, descalificados, silenciados y perseguidos. Quienes aceptan las narrativas mencionadas, son aupados, promovidos, y hasta pueden representar directamente al tinglado cleptocrático como títeres o candidatos a títeres.

Es bueno dejar claro que lo que he llamado cartel no necesariamente implica un arreglo idílico entre los miembros del sistema caza-renta. Tienen sus contradicciones internas, y pueden ser caracterizadas más bien como oligarquías de mafias caza-renta, que llegan a arreglos circunstanciales y que, dependiendo de su poder en la correlación de fuerzas , tienen unas más poder que otras en un momento dado. Y eso se refleja en sus títeres respectivos. Normalmente se agrupan en grandes alianzas, dependiendo de varios factores, entre ellos los nacionales e internacionales. Hemos dicho que en Venezuela hay dos grandes oligarquías, con sus respectivas alianzas internacionales, la roja y la azul. La roja tiene que ver con el chavismo-madurismo, con un discurso más de izquierda, con su alianza cubana y el foro de Sao Paulo. La azul tiene que ver con las oligarquías que vienen de la cuarta república y tienden a ser más liberales en su discurso y en sus alianzas internacionales. La negra es la del Estado Profundo, ya a nivel mundial.

Como se ve, no es un problema de personas (líderes políticos), o partidos, o ideologías. Ni siquiera de chavismo o anti chavismo, como veremos incluso con más profundidad. Y la alianza ahora es notable, pues incluye la mafia azul, la roja y la negra. Un milagro logrado por la mafia negra, aprovechando los grandes recursos de Venezuela, que le roban a los venezolanos, que ahora incluyen no solo petróleo y gas, sino oro, coltán y muchos otros minerales y recursos naturales como la tierra, el agua, los bosques y las playas.

3. El remedio técnico

Afortunadamente hay un remedio técnico para curar la enfermedad venezolana, muy sencillo de concebir: Un Fondo Petrolero tipo Noruega. No describiremos aquí cómo resuelve los síntomas económicos, que hacemos en el artículo citado abajo [3]. Aquí nos concentraremos en que resuelve el síntoma descrito de Economía Política porque la renta petrolera es acaparada por por el gobierno sino que va directamente a sus verdaderos propietarios, los ciudadanos. Por tanto, no va a las manos de la mafia caza-renta, a través de sus títeres. El gobierno entonces tiene que vivir, como en cualquier democracia, de los impuestos ciudadanos. Seguirá la actividad de los caza-rentas, como en cualquier país, pero se eliminará el sistema caza-renta como tal, que es lo que nos tiene como estamos, independientemente de si el gobierno es azul (como en la cuarta república) o rojo (en la quinta). Hemos planteado una transición de cinco años para el cambio de estructura, del sistema caza-rentismo, a un sistema republicano democrático con la solución técnica mencionada de cambio de propiedad y usufructo prácticos. La sexta y definitiva, sana República democrática que sirve a los ciudadanos, no a los caza-renta ni a los políticos, que deben servir a esos ciudadanos.

Los dos sistemas son estables dinámicamente, como hemos explicado en otros lados. La idea de la salida por la fuerza del sistema es generar un “shock exógeno” al sistema caza-renta, para generar lo que se llama un nuevo “punto fijo estable” al que converja el sistema con el tiempo. Se habla de punto fijo, pues, si estás ahí, no sales de ahí. Estable porque si sales de ahí un poco, sin salir del sistema, vuelves a él con el tiempo. Si no cambias, por el mencionado shock, el punto fijo, para establecer uno de democracia republicana, volverás a ese punto fijo del pasado. Por ejemplo, si solo se cambia la presidencia de la república, pero se deja el resto del sistema intacto, se saldrá solo temporalmente del sistema, que te absorberá de nuevo con el tiempo. Si, por otro lado, se logra cambiar la estructura (el punto fijo), con sus nuevas instituciones, la cultura respectiva cambiará y convergerá con el tiempo a la nueva estructura en unos cuantos años. Hemos hablado de por lo menos veinte para Venezuela. Aunque el cambio técnico es sencillo, el cambio político es sumamente difícil. E implica un shock exógeno (que no es externo, aunque en él participan fuerzas aliadas internacionales también además de las internas, que son las fundamentales) que instale una nueva estructura en unos cinco años, y un tiempo de convergencia que requiere una alianza política republicana férrea, basada en el poder ciudadano, el mayor beneficiado del cambio. Esa alianza, que hemos llamado “Pacto Republicano” es imprescindible, pues los caza-renta y sus agentes políticos y de todo tipo, incluyendo el mediático y cultural estarán siempre al acecho para torpedear los cambios que les quitan su fuente de ingreso delincuencial, que se caracteriza como tal porque representa un robo a los propietarios legítimos de la renta, los ciudadanos venezolanos.

4. La experiencia histórica en el país

El sistema caza-renta viene de la época en que se descubrió el petróleo en Venezuela. Lo que pasó con Carlos Andrés Pérez en su segundo gobierno implicó un cambio fundamental en el poder ejecutivo nacional, pues trajo a un presidente y un calificado equipo de ministros que no obedecía a los intereses de los caza-renta. Pero notemos que ese cambio no modificó el poder judicial ni el poder legislativo, ni pudo establecer el nuevo punto fijo de democrática republicana, con un Fondo Petrolero mencionado. Miguel Rodríguez, el líder del equipo, tenía claro el cambio necesario y propuso, en el papel, el “Fondo Soberano” con ese propósito. Pero el sistema caza-renta y sus beneficiarios, tanto en el tope de la estructura, como en los niveles intermedios, de títeres políticos en el Congreso, la Corte Suprema de Justicia, las gobernaciones y alcaldías, los partidos, los medios, etc, se dieron cuenta del peligro mortal de un cambio como el planteado por el nuevo gobierno, que estaba claro en que para eliminar la corrupción no bastaba quitar los zamuros. Había que quitar la carne mediante el Fondo Petrolero. ¿Qué hicieron todos esos usufructuarios del sistema, obedeciendo a quienes manejaban los hilos, los caza-renta? Le dieron un golpe de Estado de nueva generación a Carlos Andrés Pérez y su equipo, sin echar un tiro. Mediante el Congreso y la Corte Suprema, además de los medios y muchos opinadores, encuestadores, instituciones académicas, etc.

Al venir Chávez el sistema estaba intacto y muchos caza-renta estaban seguros, con los apoyos y las promesas que hubo al respecto, que no iba a haber cambios significativos en la correlación de fuerzas en la oligarquía caza-renta azul y que el nuevo gobierno iba a ser manejable. No lo fue, pues Chávez era un tipo incómodo, que quería una suerte de sistema de mercado nacionalista de izquierda, con oportunidades para los desvalidos en varias áreas, como las sociales de educación, salud y distribución de riqueza, entre ellas la propiedad de la tierra. Su elección se debió también a un descontento muy grande con el estado de cosas con la cuarta república, pues había incrementado mucho la pobreza, y la desigualdad social había aumentado notablemente, según consta en las estadísticas respectivas.

Chávez buscó un cambio superficial desde arriba, sin conocer el verdadero diagnóstico sistémico. No contaba con una maquinaria política para los cambios que quería hacer y su “partido” empezó a ser la fuerza armada, una institución impregnada hasta los tuétanos del caza-rentismo, ya que, como lo describo en mi artículo seminal sobre nuestra enfermedad [3], el militarismo es uno de sus síntomas: la institución armada en países con ese problema no garantiza la seguridad nacional, aunque ahí había gente honesta que sí que lo creía, sobre todo entre los rangos medios y bajos, sino la seguridad del cartel de mafias caza-renta a cambio de una parte de la torta.

En la superficie se trataba en realidad de un cambio estándar, con particularidades militares y de izquierda, con búsqueda de nuevas alianzas internacionales, conservando un carácter nacionalista. Aunque no implicaba un cambio, para nada, de sistema, implicaba cambios en la correlación de fuerzas de la oligarquía, pues la mafia militar, que hasta ahora había tenido papeles subordinados en el pasado (a excepción quizá del período perejimenista) empezó a tener un papel regente en esa correlación.

Es de resaltar la falta de claridad de Chávez sobre el remedio técnico y político-institucional: sin un cambio de sistema en la distribución de renta petrolera ciudadana, no se podía lograr una nueva república democrática. Quería seguir manejando la renta petrolera desde arriba, solo confiando en la buena voluntad del gobernante y su nuevo partido militar. Lo cual generó un problema grave de incentivos muy conocido en economía que devino desde temprano en una gran corrupción, además de que la institución armada ya estaba plagada de ese vicio por diseño caza-renta y por prácticas de los altos rangos castrenses que tenían sus relaciones con los partidos del estatus, Acción Democrática y Copey, y por esa vía también con los capos caza-renta del sistema anti-democrático que estamos describiendo.

En todo caso, aunque los cambios que hizo desde arriba no fueron drásticos (ver [4] en que se narran los distintos cambios pro-mercado que no significan un cambio de sistema), no gustó del todo al resto del cartel de mafias con sus conexiones internacionales establecidas, que se vieron afectados y se dio cuenta de que no lo podía manejar a Chávez como un títere estándar del caza-rentismo. Por eso le dieron un golpe de Estado en el 2002. Regresó a los pocos días, con una propuesta de diálogo, conmigo a la cabeza, que intenté cambio pro-mercado de consenso con justicia social para igualdad de oportunidades estándares. Pero el caza-rentismo no quiso, como narro en [5].

Chávez ganó la confrontación que implicó el paro petrolero y se fue completamente a las manos de Fidel Castro, que le dio un diagnóstico equivocado: el problema no era el caza-rentismo, que no quería los cambios en la cúpula delincuencial, sino “el capitalismo”, la “burguesía criolla” y el “imperialismo norteamericano”. Chávez compró ese diagnóstico, de contradicción entre derecha e izquierda, que por cierto es similar al que sostienen hoy quienes se presentan como liberales, que abogan por un cambio ideológico desde la izquierda marxista, o socialdemócrata (rojo o amarillo, como los tilda MCM), hacia la derecha, como solución “estructural” a los problemas del país.

Es claro que ni ese diagnóstico de Fidel Castro, ni las acciones y el discurso ahora “socialista”, implicaron un cambio en el sistema caza-renta. Lo que sí produjo fue una subordinación completa a Cuba, por encima de la regencia de la cúpula militar, que empezó a jugar un rol determinante en la jefatura y el usufructo de la renta petrolera. Con nuevos aliados entre los empresarios y los trabajadores. Pero sin cambiar lo principal, el asunto de la propiedad de la renta, que debía ir a los ciudadanos. En esa referencia, narro lo que me tocó vivir, como parte protagonista en mi corta gestión, de once meses, como Ministro de Planificación, Jefe del Gabinete Económico, Presidente de la Comisión de Transformación del Estado, y de la Comisión de Democratización [5]. Fui derrotado por el sistema caza-renta (tanto el rojo como el azul), como lo fue el país, y como lo fue el intento de cambio de CAP, con su equipo de ministros muy bien intencionados y con claridad sobre el verdadero diagnóstico de nuestra realidad. Aunque cometí muchos errores de tipo personal, me queda el consuelo de no haber sucumbido a las tentaciones del mar de las sirenas, de corrupción económica o búsqueda de poder. Como he rechazado el caza-rentismo azul también [6].

5. El caza-rentismo mundial y la semilla venezolana

He mostrado la mundialización de nuestra enfermedad, con una variante de nuestro virus, el “rentismo” [7]. Tanto la prueba alternativa de frade ahí presentada, como la teoría de la conspiración mundial se han confirmado ahora en distintos lugares, en particular con que ha pasado con Elon Musk y Twitter y ya es vox populi. Igualmente con lo que ha pasado con la guerra de Ucrania y el beneficio del complejo industrial militar, además de lo ocurrido con las vacunas y las farmacéuticas, todo va encajando con esa teoría. El poder que tiene el Estado Profundo es muy fuerte. Los acuerdos a que está llegando el gobierno de Biden con Maduro y Cuba son notables. Nuestra teoría de incidencia en lo que está pasando en Venezuela no es más que lógica. En el comunicado anterior hacemos la siguiente observación, muy reveladora al respecto, que refuerza la hipótesis, pues con el nuevo arreglo, todos saldrían ganando:

“¿Cómo se logra ese milagro?”

“En otros países eso sería imposible, pues tendrían que administrar la escasez y pelearse por ella, pero en el nuestro la cosa es distinta y la razón es que aquí hay muchos recursos naturales. Se trata de una mina, como decimos en criollo. No solo en petróleo y otros minerales extremadamente valiosos, como el oro, el Coltán, etc. Sino el territorio, el agua, las grandes extensiones de playas, montañas y otras bellezas naturales únicas en el planeta. Y la posición geográfica estratégica como pocas en el mundo. Mucho de esto se ve “malgastado” por la actual administración del ineficiente Maduro. Los grandes ladrones quieren administrar mejor esa inmensa riqueza y darle su parte a los rateros locales, incluyendo las sanguijuelas cubanas”.

La conclusión es que nuestra tesis es robusta: quieren cambios para fortalecer el sistema caza-renta a nivel ya internacional, con los locales obteniendo cada quien su parte de la torta ampliada. Lo que hemos referimos, de apoyo de Biden a la Asamblea Nacional del 2015 con recursos de activos internacionales, con apoyo al cese de Guaidó y los acuerdos en ese sentido con el desgobierno de Maduro, lo confirma adicionalmente. Noten que la administración de Joe Biden está actuando desde el poder económico, que es lo que mueve el sistema caza-renta. Quedan contentos tanto la oposición cohabitadora, como el régimen dominado por Cuba. Todo cuadra.

Como hemos dicho, MCM parece estar dateada y actúa como tal, tratando de entrar en el juego como alternativa electoral en las contiendas por venir, tanto primarias como presidenciales. Aprovechando el desprestigio opositor, y el rechazo popular a Maduro. Con su tesis, en el mejor de los casos, de que con la presidencia va a ser capaz de cambiar las cosas en el país. Ni Carlos Andrés pudo por las buenas. Mucho menos en estas circunstancias: sería usada como una máscara más, para afianzar un sistema que expropia a los venezolanos de su propiedad. El remedio no va por ahí. La salida es por la fuerza, y con los aliados naturales: el pueblo venezolano, con sus liderazgos ciudadanos, militares, policiales, laborales, de la resistencia civil organizada. Es interesante que ahora Leopoldo, al entrar en la contienda electoral de primarias, se presenta como un “opositor radical”, criticando al G3, como decantándose de la cohabitación con el desgobierno de Maduro. Cuando, por sus acciones pasadas, que hemos analizado del G4, fue un cohabitador más. Su intención es claramente, en el rompecabezas que estamos armando, que cuadra perfectamente, disputarle a MCM un espacio, dado el rechazo generalizado a la oposición corrupta. Pero le va a costar más que a ella, claro, pues la gente sabe que él es parte de esa oposición [8].

6. Indicios de captura de MCM por el Caza-rentismo y mi experiencia personal

Pero la cosa es peor. Hablamos “en el mejor de los casos”. En otras palabras, de que MCM no esté capturada, de entrada por el caza-rentismo azul y por el negro. Pero hay fuertes indicios, ,que hemos venido mostrando, que lo contrario parece ser lo cierto. Es bueno recordar algunos de ellos en el contexto de lo dicho aquí. La cobertura mediática que tiene es crucial, pues, como argumenté en la tesis sobre la conspiración del caza-rentismo mundial, el campo de batalla comunicacional es el principal en esta guerra. Y las fake news, las noticias engañosas son el arma principal que usa el caza-rentismo en todas partes, según lo hemos ilustrado también en Venezuela, cuando hablé d e las mentiras del caza-rentismo azul desde que tumbó a CAP II y también con el golpe de 2002 y el paro petrolero: son altamente culpables de lo que está pasando, y se ponen como víctimas.

Es de hacer notar que varios medios que normalmente impulsaban a Juan Guaidó de repente empezaron a cubrirla e impulsarla a ella. Todo coincidente con lo dicho de armar el rompecabezas. Es interesante que medios como la Patilla, a favor de MCM, desde hace tiempo no aceptan los artículos míos, o los comunicados del Movimiento Libertadores. Pero no solo pasa con el caza-rentismo azul: también pasa por el rojo, pues Aporrea, financiado por Rafael Ramírez, tampoco nos cubre. Otros medios nos han ninguneado sistemáticamente últimamente. Cuando empecé a denunciar el caza-rentismo, de todos los colores, no solo el rojo, entonces fui sistemáticamente ninguneado. Como se podrán imaginar, no era por falta de calidad, o de relevancia en los artículos o comunicados del Movimiento Libertadores. Si fuéramos irrelevantes nos darían cabida, por lo menos para agregar a la confusión que quieren los que manejan los hilos, con algunos adornos adicionales en el teatro. El teatro de títeres.

Personalmente me ha tocado ver de cerca cómo trabaja el caza-rentismo en Venezuela y sus redes interconectadas. Cuando había regresado a Venezuela luego de Chicago y España, también noté que trataron de capturarme los caza-rentas, azules y rojos. A ver si echo en cuento con detalle algún día. Pero mi conclusión, de la cual estoy cada más convencido, es que nada ocurre en este país (y en el mundo ahora!) sin que quienes manejan los hilos más allá de lo que se ver en el teatro mediático, que es el de títeres también, decidan al respecto. Y son caza-renta nacionales e internacionales ahora. Mi denuncia sistemática de las movidas del Estado Profundo nos ha valido también ninguneo a ese nivel.

Es muy notable que personalmente sea proyectado por los medios del caza-rentismo azul como un ex-chavista. Cuando soy de los pocos que ha demostrado en la práctica, con hechos, más allá de las palabras, lo que hizo famoso a Ulises, quien como capitán de barco que fue capaz de pasar exitosamente por el mar de las sirenas sin caer en la tentación de su irresistible canto, manteniendo los principios. En mi caso, modestia aparte, y gracias a Dios, con más méritos que Ulises, pues ni siquiera tuve que amarrarme al mástil para poder pasar la prueba. Personalmente no aspiro a cargos públicos, por diseño del Movimiento Libertadores, que siempre debe ser expresión ciudadana, y no un partido político con aspiración de poder, pero ese es el tipo de líderes que necesita Venezuela en la transición, pues en ese momento no habrá mástil al que amarrarse, que evite que uno se corrompa: el fondo petrolero. Por eso tienen tanto mérito también CAP y su tren de ministros liderados por Miguel Rodríguez. Gente honesta (con Moral), calificada (con Luces) y con entrega por Venezuela (dotados de Amor). Aquí se necesitan “señales costosas”, pues, como se dice en Teoría de Juegos de señales, que establecen un “equilibrio de separación” entre los camaleones de la política, y los políticos honestos y auténticos. La señal de aceptación y, ahora, de abierta promoción por parte del caza-rentismo azul y del negro, son malas señales en el caso de MCM. Por algo le exigimos pasar por el bautismo de fuego, que sí que es una señal costosa, diferenciadora entre el lado bueno y el malo.

7. Herramientas gerenciales: La presunción de culpabilidad y las profecías auto-cumplidas

La hipótesis de que MCM es una ficha más del caza-rentismo venezolano es firme. Y debe ser la hipótesis d e trabajo gerencial en política, que es lo que estamos impulsando en el Movimiento Libertadores.

De hecho, este aprendizaje sobre el verdadero mapa de conflicto nos ha costado muchas vidas, mucha hambre, muchos presos, mártires, oportunidades d e oro perdidas (como la de CAP) y sufrimiento de todo tipo. ¿Es que acaso lo vamos a echar por la borda? Quien no lo asuma, es ya sospechoso por eso mismo. Que no lo asumamos nosotros, como una expresión legítima que somos del pueblo venezolano, sería una gran irresponsabilidad, por decir lo menos.

Los caza-renta y los políticos, pues, son culpables hasta que demuestren lo contrario. Eso incluye a MCM. Queremos hechos, no palabras. Pues por sus obras es que los podemos conocer. Y los indicios, de irse por su lado, parecer ficha del caza-rentismo nacional azul, el que echó a CAP II y echó a Chávez a las manos de Fidel. No expresarse sobre el fraude en EEUU y denunciar el caza-rentismo mundial, hace sospechar de fichaje con el caza-rentismo mundial, el negro.

Por otro lado, los venezolanos son inocentes hasta que se demuestre lo contrario. En particular el Movimiento Libertadores, que no aspira a cargos políticos y es una expresión de la ciudadanía.

Por último, mencionaré la estrategia de Teoría de Juegos en los llamados “juegos de coordinación”. A los políticos les aplicamos la máxima de “ver para creer”, mientras que entre los ciudadanos y sus aliados mencionados, militares, trabajadores, etc, se aplica la máxima de “creer para ver”.

La razón en el último caso es que, si la gran mayoría de los venezolanos estamos pendientes para activarnos cuando llegue el momento clave, mientras nos vamos organizando y concientizando y uniendo, si cada quien hace la parte que le toca en la acción de salida por la fuerza (plan C, de insurrección popular con apoyo militar patriota), bajo el supuesto de que los demás harán lo mismo, lograremos el objetivo. Si adoptáramos la actitud entre nosotros de “ver para creer”, no lograríamos el objetivo, pues ni siquiera tendríamos incentivos para organizarnos y seguir luchando, aumentando nuestra fuerza progresivamente desde la resistencia. Las expectativas son cruciales, y se aplica la teoría de las profecías auto-cumplidas. Es lo que se llama “equilibro de Nash” en un juego simultáneo de coordinación: si cada uno de nosotros cree que los demás harán lo mismo, al hacer nuestra parte se logra una situación mucho mejor a que si no actuamos.

En cambio, en relación a políticos en duda, en este caso MCM (los demás, como los de la MUD, incluyendo a Juan Guaidó, Manuel Rosales, Capriles, etc, están por supuesto ya descartados), les exigimos ver su jugada primero, de hechos, más allá de las promesas y el comportamiento tradicional de líderes fabricados mediáticamente, para poder creer en ella como aliada. Sería un equilibrio de Nash pero en un juego dinámico: ellos tienen que jugar primero, y nosotros respondemos óptimamente, de acuerdo a lo que veamos. Si ellos juegan el equilibrio, deben tener en cuenta nuestra reacción posterior cuando tomen la decisión de jugar en la práctica (no es cuestión de palabras, es claro). Si lo hacen, es señal de que están de este lado. Si no, es señal de que están jugando un equilibrio con el otro jugador, el enemigo: los caza-renta, de cualquier color, y de todos los colores coordinados, como es nuestra tesis.

8. Conclusión y plan táctico de una alianza ciudadana del coraje

Para responder a los llamados de apoyo a MCM de los venezolanos mencionados arriba, menciono los siguientes puntos de partida y requisitos básicos para una coalición del coraje como la que hemos planteado:

1. Los venezolanos no podemos aceptar que las campañas políticas sean financiados por los caza-renta como Nelson Mezerhane, del caza-rentismo azul aliado con el rojo, ni ninguno de ellos. Recuerdo que trató de corromperme, en un par de emboscadas en embajadas árabes con Vice-presidentes del Banco Federal, que me ofrecieron unas “princesitas”. Sin embargo, como hemos descrito, en particular en el aspecto mediático, entre otros, la gente que rodea a MCM, del caza-rentismo azul, indica claramente que no es de confiar en este aspecto del financiamiento de su actividad política. Además de lo dicho, quiero mencionar que el encargado del financiamiento de Vente, por cosas de esta lucha, me comentó que esa organización estaba buscando el financiamiento de Mezerhane, lo cual fue parte de la motivación de nuestra petición original de bautismo de fuego de MCM, pues sabemos que es un banquero corrupto del caza-rentismo azul, que ha tenido importantes relaciones “de trabajo” con el caza-rentismo rojo. Pero además, uno de los líderes de Vente, operador de cara a los partidos opositores y asesor estratégico en dicho partido, comentó en un chat público, la Venezuela-virtual, comentando nuestro documento de bautismo de fuego, que Mezerhane no tendría porqué ser rechazado como financista de la campaña de ese partido. Usó estas palabras al respecto: “De todas formas si Vente llega a participar en algún evento electoral, ya sea en las primarias/renovación o en las presidenciales, pienso que naturalmente necesitará de contribuciones económicas por parte de la ciudadanía. Cosa que no veo reprochable mientras que recibirlas no esté atadas a algún favor particular, aunque sí al interés de inclusive hacer dinero, en un ambiente propicio para ello, con mayores oportunidades para todos”. Como hemos dicho arriba, no podemos aceptar a este “ciudadano” en esta tarea, incluso si dice que no busca beneficios, pues sabemos cuánto valen sus palabras. Y mucho menos si se prometen beneficios económicos en la jugada, por lo que hemos dicho de nuestro sistema caza-renta. Sabemos que es difícil competir con los partidos del sistema en una campaña electoral si no se cuenta con mucho dinero. Pero es un reto que el dinero venga del ciudadano común. Con muchas contribuciones, aunque sean pocas, se logra un buen resultado, además de aprovechar las fortalezas propias y el rechazo popular a los partidos del estatus. Gota a gota se hace un mar. Pero tienen que ser gotas del agua limpia del colibrí, el animal que mejor contribuyó a salvar la selva del incendio que estaba destruyendo todo.

2. Cualquier miembro de la coalición del coraje, en particular el nuevo liderazgo que necesitamos, tiene que tener claro el mapa de conflicto: es entre el caza-rentismo y los ciudadanos. Alguien que crea que la contradicción clave en este momento es ideológica, entre liberalismo y marxismo, o derecha e izquierda, contribuirá a seguir ocultando las cosas y trabajar por el sistema. MCM, aunque últimamente ha dicho que la lucha es entre el bien y el mal, lo cual es un progreso, se mantiene en su planteamiento de que la lucha es ideológica, entre la izquierda roja o amarilla (esta última la de la oposición), y la derecha. Una posición de ese tipo excluye a gente que no es del desgobierno o de la oposición corrupta que es honesta y del coraje, pero que es de centro o de izquierda en lo ideológico. Es claro que, una vez que se tiene claro el mapa de conflicto, rige el principio de que en la unión está la fuerza. Este principio era errado si el conflicto era entre la “dictadura” y los “demócratas”, pero es el correcto cuando el conflicto es entre el bien y el mal (hemos explicado el procedimiento gerencial que se usa para hacer el deslinde, usando “proxis” (variables observables, como el de la salida por la fuerza, o por elecciones). Para rescatar y restaurar al país, pues, debemos unirnos todos los que estamos del lado del bien en esta lucha, con dos criterios: honestos y del coraje (salida por la fuerza, tanto de Maduro, como del sistema). Eso admite gente, con esas características, que sean de derecha, de centro, de izquierda, liberal, conservador, trabajadores, empresarios, campesinos, profesionales, etc. Hasta aceptamos al chavismo de base, que conserva su creencia en Chávez pero se ha decepcionado de todo esto y quiere un cambio verdadero, siempre y cuando sea honesto y del coraje. Luego de la salida por la fuerza del sistema, como lo planteamos, cuando venga el período democrático luego de la transición, del cambio de estructura, podrán pelearse todo lo que quieran por sus ideologías, como es incluso sano y bueno en una democracia. Pero hacer énfasis ahorita en ideologías y en exclusiones por esa vía, indica un punto de vista errado en lo estratégico y en el mapa de conflicto. MCM ha rechazado los llamados de unidad en ese sentido y con ese mapa de conflicto. Eso es divisivo y beneficia al lado enemigo, el del caza-rentismo. Lo cual obliga a mantener las sospechas que hemos expuesto de si su naturaleza es realmente caza-renta, o es una cuestión de error. Solo la práctica permitirá dilucidar esa pregunta, pero lo hecho hasta ahora confirma la hipótesis de partida.

3. Hemos estado impulsando unas “primarias legítimas”, y tuvimos la esperanza de tener candidatos del coraje en las que está organizando la oposición política, con la opción de que, si ganaba un candidato del coraje, fuera proclamado Presidente de una Junta de Transición con los otros cuatro candidatos con más votos. Pero el sistema caza-renta se ha encargado de negar ese derecho al pueblo venezolano. La pregunta es si eso va a frenar nuestro Plan B, de elección de nuevo liderazgo, que sea legítimo y efectivo para organizar el Plan C, de insurrección popular con apoyo militar patriota, para deponer al tirano y comenzar un período de Transición para refundar la República en unos cinco años. La respuesta es que ya dimos suficiente oportunidad a la oposición para demostrar su carácter democrático. Y procederemos a impulsar la conformación de una Junta de Transición de facto, de hecho, que por lo pronto no será electa en sufragio universal, pues no están dadas las condiciones por todo lo dicho. Sin embargo, contamos con candidatos naturales que se han ganado una elección desde sus bases de apoyo, sean populares en la calle, de gestión por los derechos humanos en organizaciones internacionales, por su posición histórica como funcionarios en el pasado, etc.

4. Hay excelentes candidatos para liderar Venezuela, con los requeridos requisitos de Moral, Luces y Amor, tanto para organizar la salida de Maduro (ensamblando y artillando el Hummer), como la salida del sistema. Entre ellos están los nombres de algunos candidatos que salieron ganadores en una elección simulada que hicimos en el pasado, que puede encontrarse en las notas. Gente como Miguel Rodríguez, quien fue el líder de equipo económico del segundo gobierno de Carlos Andrés Pérez. Tamara Suju, notable defensora de los derechos humanos de los venezolanos. Enrique Aristeguieta Gramko, por su rol histórico en la Junta Patriótica y su posición moral inquebrantable contra el régimen y la corrupción. En lo militar destacan el Vice-Almirante Iván Carratú Molina y General Javier Nieto Quintero, por sus posiciones históricas consecuentes y de organización del rescate de la fuerza armada con soldados patriotas de la resistencia en el exilio y en el territorio. En lo policial destaca Camacuro Araujo, por su gestión en unir a las cuatro fuerzas policiales de la resistencia en el exilio y en el país. En materia de resistencia civil organizada, destaca Víctor Rodríguez, por mantener y seguir impulsando a los “Templarios” que vienen de las luchas de calle del 2014 y el 2017. Hay otros candidatos que salieron en la simulación, como Alberto Franceschi, sobresaliente político y analista del coraje, y Andrés Mezgravis y Marcelo Crovato, promotores de la sociedad civil en el exilio. Entre ellos se puede nombrar una Junta de cinco miembros, con suplentes. Si hay otros que no hemos mencionados, se pueden agregar de la misma manera y se decide por consenso sobre los principales y suplentes, con sus períodos, sus funciones y sus rotaciones. Las funciones a ser cubiertas incluyen lo económico, lo social, lo jurídico-institucional, derechos humanos y justicia, lo de relaciones internacionales, lo de seguridad nacional, lo de seguridad interna y lo de organización y promoción ciudadana. Por todo lo dicho, MCM se podría agregar al equipo si pasa la prueba del bautismo de fuego según lo determinen los demás miembros del equipo. Lo mismo para Antonio Ledezma, por ejemplo. Tenemos que ser muy rigurosos en este tema de definir el nuevo liderazgo, pues es un requisito fundamental no ser parte, ni siquiera inconscientemente, del equipo contrario al de los ciudadanos, el de los caza-renta de cualquier color. Es cuestión de tener un equipo, que trabaje con espíritu de cuerpo, con un objetivo común: recuperación y refundación de la república. También hay otros candidatos naturales en el territorio, pero por razones de seguridad es mejor para los miembros Junta de Transición operar desde el exilio. Es bueno reiterar que personalmente no puedo ser candidato a la Junta de Transición, como lo he dicho, por diseño del Movimiento Libertadores, que nunca podrá ser un partido político con aspiraciones de representación ciudadana.

5. Una vez depuesto el tirano se implementa la salida del punto fijo del sistema dinámico caza-renta del que hemos hablado. Sin un cambio de sistema, el tiempo hará regresar el país al punto de partida. Insistimos en que tratar de salir del sistema caza-renta desde dentro, a través de una elección como la planteada, significaría una traición al caza-rentismo, tanto azul como negro. La predicción es que le darían un golpe de estado, como pasó con Carlos Andrés Pérez. La única manera de hacer un cambio por la fuera de sistema es establecer un Gobierno de Transición por decreto, presidido por la Junta de Transición mencionada, con sus suplentes y sus funciones. Como primer acto de gobierno, convocar un proceso Constituyente Originario en el que la ciudadanía sea declarada la protagonista para un cambio de estructura que implique el paso de la propiedad y el usufructo directo de la renta petrolera y minera a su verdadero propietario: el pueblo venezolano. El nuevo gobierno no debe manejar esa renta y debe vivir de los impuestos, como en cualquier país democrático. Eso debe acompañar la sustitución inmediata, dentro del mismo proceso de insurrección popular con apoyo militar patriota (el Plan C del Movimiento Libertadores), de todas las gobernaciones, alcaldías, asamblea nacional, tribunal supremo, fiscalía, defensoría, y todos los demás poderes. Además de deponer a todos los altos mandos militares y sustituirlos por la dirigencia militar patriota que se ha organizado. Lo mismo en materia policial. E iniciar el proceso de establecer una nueva Constitución en que conste el tema de la propiedad y el usufructo directo ciudadano sobre la renta petrolera y minera.

6. En lo internacional debe haber un deslinde y una denuncia por lo nefasto para los ciudadanos del mundo del caza-rentismo negro. En particular de Joe Biden en Estados Unidos y del Estado Profundo a nivel internacional, con su Nuevo Orden Mundial y la agenda 2030. Los aliados naturales de los ciudadanos venezolanos en ese país son los patriotas norteamericanos, cuyo líder principal en el momento es Donald Trump. En el resto del mundo, los aliados naturales son los pueblos que están en proceso de reclamar sus derechos contra el abuso de sus respectivas élites económicas y políticas, para instaurar una institucionalidad al servicio ciudadano, no de los caza-renta. Como en Cuba, Nicaragua, Brasil, China, Irán, Europa, Canadá, entre muchos otros que están en desarrollo ante nuestros ojos.

Empieza por hacer lo necesario. Luego haz lo posible y de pronto estarás logrando lo imposible. San Francisco de Asís

Gota a gota hace un Tsunami

Las gotas de agua limpia del colibrí La verdad nos hará libres. Jesús de Nazaret

Todos somos libertadores

🙏💪👊🏇❤️🇻🇪🤝🌎🌱

Notas de pie de página:

1. El Tesoro de EEUU otorga licencias a la AN para manejar activos externos:

https://morfema.press/actualidad/tesoro-de-eeuu-otorgo-licencias-a-la-an-2015-para-manejar-activos-venezolanos/

2. Referencias sobre el emplazamiento a María Corina Machado y temas relacionados:

2.1. Bautismo a María Corina Machado:

https://www.quehacer.wiki/wiki/Bautismo_de_fuego_a_Mar%C3%ADa_Corina

2.2. Respuesta a un representante de Vente: